¿Cómo empecé mi blog? (2)

dilluns 16 de febrer 2004 - Segón post blogspot.

1. Di vueltas y vueltas por toda la red mirando modelos. Todos eran demasiado eruditos y poco prácticos. Los blogs personales son interesantes siempre y cuando el género introspectivo que cultivan sirva para contribuir a crear una imagen virtual que active, que pase a la acción.

2. Me registré en Blogger.

3. Tuve durante un año una bitácora escondida donde recopilé tonterías varias.

4. Husmeé por la red buscando modelos. Lo encontré en una comunidad de Bitacoras.com.

5. Creé esta bitácora. Me registré en FlooChat y me dieron el código. Me registré en Backblog y me dieron el código para los Comentarios. Me registré en Nedestatbasic y me dieron el código para las estadísticas.

Todo gratis.

Intuyo que la simultaneidad y la fluidez de la escritura que propicia el blog puede ser utilizada didácticamente.

Pienso:
género introspectivo, blogs literarios, imitación de diarios de viaje, afianzamiento de la propia identidad. Una buena herramienta para nouvinguts. Ufffffffff miles de cosas...

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Un poco de prehistoria:

Mi primer proyecto en serio con los alumnos fue la experimentación con Multigestor Windows. Me habían dado un grupo de refuerzo de 4ESO (de esos llamados "de diversidad". Era un grupo poco motivado y con escasas posibilidades de obtener el graduado. Había preparado una serie de ejercicios en Word. Uno de ellos era un cuento de Edgar Alan Poe con errores de ortografía deliberados para que ellos corrigieran con el corrector. También debían utilizar el diccionario de sinónimos del procesador para reeemplazar palabras subrayadas. Este último ejercicio fue realmente difícil ya que debían adecuarse al contexto y ajustar la concordancia.
El Multigestor lo utilicé a raíz de que el Clic me parecía muy infantil para ellos. El Multigestor es un programa de autor muy fácil de utilizar. Así, ellos mismos trabajaron morfología y sintaxis preparando las actividades que posteriormente realizarían.
Fue la primera experiencia donde ellos pudieron acceder a las "reglas del programa" y conocer la trastienda de una herramienta de creación. No era programar, pero... casi casi.

Esta experiencia fue recogida en el Proyecto Pedactice, que realizó la UAB.

En esos tiempos, la idea de que la red iba a transformarse en este poderoso medio de comunicación era algo que pertenecía al futuro.